Breve historia de Alcalá de Henares

Primeros asentamientos en Alcalá de Henares
Todavía no se conoce con precisión la procedencia de los primeros asentamientos humanos, aunque los vestigios arqueológicos hallados nos hablan de la existencia de población en los alrededores de Alcalá ya durante el Neolítico y la edad del Bronce. Estos asentamientos se situaron en los cerros que están próximos al sur de la actual población.
En uno de estos cerros (San Juan del Viso), en la meseta que lo corona, aparecen indicios de lo que podría haber sido una ciudad celtibérica. Esta ciudad se conoce como Iplacea, y es el posible embrión de Alcalá. En este mismo lugar también se encuentran restos cercanos a la época de la romanización, los cuales hacen pensar que allí existió un núcleo de población hasta la época romana.
El cerro de San Juan del Viso es un lugar con claras funciones defensivas, de fácil acceso por un lado y bastante agreste al norte. Desde aquí, además, se domina toda la llanura de la Campiña.
Historia de Alcalá en época romana
Alcalá ya era una ciudad importante en este periodo, que incluso aparecía en los mapas Romanos y Áreas administrativas de la Península Ibérica.
El nombre de Complutum, como Alcalá fue llamada en esta época, se cree que deriva de compluvium, palabra latina que significa lugar donde converge en agua, pues son varios los arroyos que, como el Camarmilla y el Torote, afluyen al Henares.
A mediados del siglo I a.C., la población de los cerros baja al valle y se asienta sobre esta zona más llana. Aquí se desarrolló un núcleo urbano que además se conectaba con las calzadas romanas que unían Caesaraugusta (Zaragoza) y Emerita Augusta (Mérida).
De esta época tenemos la Casa Hippolytus, la cual es actualmente un museo. Muy cerca de ésta, se encuentran los restos del Fórum de Complutum.